22 de octubre de 2024

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Rinden homenaje a la narradora y ensayista Ana Clavel

>>En la Sala Manuel M. Ponce, colegas, familiares y amigos le rindieron homenaje, donde los ponentes destacaron su aportación a la literatura erótica y existencialista

La Secretaría de Cultura del Gobierno de México y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal), a través de la Coordinación Nacional de Literatura, rindieron un homenaje a la escritora Ana Clavel, en el cual participaron la poeta Claudina Domingo, el ensayista José María Espinasa y la cronista Ana García Bergua. El evento se realizó este domingo 6 de octubre de 2024 en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes.

Tras agradecer el homenaje, Ana Clavel admitió que su novela Las violetas son flores del deseo (2007) es una de las obras que más gratificaciones le ha dado, al ser traducida en diferentes idiomas, como el francés y el árabe; mientras que el primer libro que leyó fue La vuelta al mundo en ochenta días en la primaria pública donde estudió.

“Esto fue toda una aventura y una lección, porque en mi casa no se leía ni el periódico, mi papá había muerto cuando tenía tres años, mi madre viuda tenía que sostenernos, entonces no había para lujos extras”, agregó.

La autora de Breve tratado del corazón (2019) contó que publicó su primer libro a los 23 años de edad con el título Fuera de escena (1984), una serie literaria donde también publicaron otros escritores jóvenes de la época, como Francisco Segovia, Mónica Lavín y Rosa Beltrán, entre otros autores.

En su turno, Ana García Bergua refirió que al igual que la protagonista de su novela Cuerpo náufrago (2005) —quien un día amanece convertida en varón y se ve obligada a habitar un cuerpo y unos espacios que le son ajenos, hasta apropiárselos—, Ana Clavel se ha ido apropiando de mundos no exactamente vedados, “pero sí un poco ocultos, delicados, mundos que hay que pisar con tiento, y más aún en nuestra época de la cancelación, como el deseo de las nínfulas, de las púberas, en su novela Las ninfas a veces sonríen (2013)”, expuso.

En su oportunidad, el escritor José María Espinasa afirmó que la narrativa de Ana Clavel está precedida por la literatura erótica que la antecede, además de elementos trasgresores y paródicos.

“¿Qué busca la sensualidad narrativa de Ana? Desde luego no solo —aunque también— provocar, pero busca otro tipo de registros más profundos que los de la Generación de los cincuenta (…) También busca entender la reacción sea de complicidad o de rechazo, o incluso de escándalo”.

En su turno, la poeta y narradora Claudina Domingo afirmó que Ana Clavel hace uso de diversos recursos literarios en su obra Los deseos y su sombra (2000), como la experimentación, las crónicas, los cambios de voz y los lindes entre la fantasía y la realidad, que dan como resultado una narrativa asociada a lo emocional y al autodescubrimiento: “Sus personajes viven una especie de sitio interior por motivos que podrían parecer sociales pero también viven muy acendradas sus emociones, en un panorama de deseos y autodescubrimiento”.

La autora también destacó el uso de la sombra en la literatura de Ana Clavel, como un elemento artístico, pero también freudiano: “Los personajes de Ana Clavel siempre van en esa búsqueda de reencontrarse con la sombra, reconocer la propia sombra”.

Al entregarle el reconocimiento a Ana Clavel por su destacada trayectoria en las letras mexicanas, la encargada de despacho de la CNL, Rosa Guadalupe García Moreno, agradeció a los ponentes su perspectiva sobre la obra de la autora homenajeada.

Asimismo, el músico y narrador Raúl Alberto Romero Torres realizó una lectura en voz alta de un fragmento de Cuerpo náufrago.

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Redacción